Anceld Wechsel

Anceld Wechsel

Descripción Psicológica

Un hombre que no teme más que la desgracia de no ser dueño de su propio destino, de estar sujeto a los caprichos de alguien, por más que ese alguien sea superior. A fin de cuentas, ¿quién puede proclamarse superior al resto de las personas y salir victorioso? Únicamente aquél que posea un valor de poder mayor que el resto de las personas, pudiendo identificarlo así como Supremo, pues todos aspiran a él pero nadie lo consigue. Esto es lo que Anceld busca: ser el Supremo, aunque sabe que nunca lo conseguirá.
¿Qué características tiene el Supremo? Hombre, pues así lo ha demostrado el machismo históricamente y él no ha de ser menos, salvo con su hermana. Su hermana es la única mujer que se salva de ser inferior a él, pues lo ha demostrado desde que son bebés. Sangre pura, pues ningún tipo de desperfecto puede existir en el Supremo. Esta característica es la que él busca solucionar con la muerte de su sobrino, el último vestigio de sangre sucia en la familia Wechsel. Ni un sólo tachón ha de existir vivo en su apellido para que Anceld pueda considerarse digno. Sumamente inteligente, pues ha de ser superior a todas las otras personas...
Anceld no tiene pensado buscar soluciones a las otras trabas respecto a las características hasta que no solucione la de su sobrino.
Es sádico, nada empático y está profundamente trastornado a causa de su estancia en Azkaban, lo que resultó en que ha olvidado parte de su pasado, como su época de crianza, y ésta ha sido sustituida por múltiples imágenes deseadas de la muerte y tortura de aquéllos que se lo merecen. Sueña con sostener en sus manos el corazón aún latiente de Engel.
No encuentra el amor, porque no lo busca. Mantiene relaciones sexuales únicamente con el fin de liberarse y obtener el placer de ellas, pero no desarrolla ningún otro sentimiento.
Teme su muerte, y más aún si ésta tuviera que ver con las criaturas que tanto detesta y le provocan terror: los elefantes.

Historia

Vio la luz en la ciudad de Baviera, en Alemania, como uno de los dos mellizos que habrían de convertirse en la nueva alegría de una familia perfectamente acomodada, con alta clase y sangre pura, esto es, nombre intachable. Todos esos beneficios le fueron otorgados a Anceld en el momento de su nacimiento, y se simbolizaban con su apellido: Wechsel. Sus padres gozaban de un respeto grande y bien ganado dentro de la sociedad mágica, mas, curiosamente dado su estatus social, educaban ellos mismos a sus hijos y dentro de unos valores de igualdad sin prejuicios. No obstante, tanto él como su melliza serían quienes rechazarían esos valores y personificarían la defensa de la pureza con el apellido Wechsel. Desde pequeño se mostró intolerante y ligeramente caprichoso, demostrando su magia en un ataque de berrinche. Como excepción Wechsel, ambos mellizos fueron enviados a la casa Slytherin a su entrada en Hogwarts, contrastando con el resto de parientes Ravenclaw. No obstante, seguía teniendo el apellido que tenía, por lo que sus resultados eran bien apreciados, y el provecho obtenido de sus siete años de educación fue perceptible. Sus tres asignaturas favoritas, y por tanto aquéllas en las que sus resultados eran mejores, fueron Pociones, Encantamientos y Defensa Contra las Artes Oscuras, aunque muchas veces bromeó, y otras seriamente comentó, con su hermana que sería de mucho mayor provecho que la asignatura fuese Artes Oscuras. Para cuantos estuviesen atentos a Anceld, bien por ser compañeros o bien por ser sus hermanos, no era un secreto que su única aliada verdadera era su melliza, y ningún otro miembro de la familia Wechsel se llevaba realmente con él. Podía verse que también tenía una amiga, aunque de eso poco entendían ambos, que era Bellatrix Black, con quien compartía ideales y, posteriormente, compartiría locura al salir de Azkaban. Entró a trabajar al departamento de Aplicación de la Ley Mágica al salir de Hogwarts, donde su ambición hizo que pronto comenzara a escalar puestos. Tras la caída de Lord Voldemort y de todo lo que apoyaban muchos magos de sangre pura, años más tarde, unos mortífagos que deseaban continuar lo que su Lord había comenzado fueron a castigar a la familia Wechsel, traidores a la sangre. Anceld y Richelle lograron salvarse, gracias a que eran viejos conocidos de Hogwarts de algunos de los sicarios, pero con la condición de que se unieran a la Marca, lo cual tuvo también como requisito que fueran los asesinos de los más jóvenes miembros de la familia Wechsel: Adler y Arabelle, junto a su hijo Engel. Debían torturarlos y matarlos, salvaguardando de esta manera el honor de su apellido y su vida. No obstante, durante la tortura del pequeño irrumpieron aurores en la escena, avisados por Dios sabe quién, y obligaron a la huida rápida de los mortífagos allí presentes, quedando algunos rezagados y, por tanto, arrestados. Aunque lograron huir en un principio, los mellizos fueron detenidos poco más tarde. Su estancia en Azkaban habría de convertir a ambos en lunáticos, sedientos de venganza contra su sobrino, a quien buscarían matar en cuanto lograsen salir de aquel infierno. Anceld logró fugarse en el año 1995, junto con su hermana y otros varios mortífagos, y decidieron buscar y acabar el trabajo que habían comenzado con su sobrino. Pero no era tarea fácil dar con él, pues se encontraba en Hogwarts, bajo la protección de Dumbledore o siendo absolutamente imprescindible mantener el regreso de Lord Voldemort en secreto, o bien Engel ya estaba prevenido, gracias a la prensa, y no iba a dejarles el camino llano para que lo encontraran. Sin embargo, el ascenso del Señor Tenebroso al poder fue un gran escalón para ambos mortífagos, pues se les hacía más sencilla la búsqueda pudiendo hacerlo sin ser perseguidos. Anceld decidió que lo más sensato era regresar al Ministerio, en su antiguo departamento, donde tendrían un buen puesto del cual valerse para encontrar al último traidor a la sangre de los Wechsel.  

Otros Datos